Miguel Galuccio negoció hoy en Casa de Gobierno el tiempo y forma de su salida de YPF. Lo hizo en una reunión con Marcos Peña. Según lo conversado en esa cita, Galuccio dejará la presidencia de la compañía, que va para Miguel Gutiérrez, hoy miembro del directorio. Galuccio permanecerá como CEO hasta la próxima reunión del directorio que tratará la renuncia que presentó en la tarde del martes, después de una reunión con José María Aranguren y Mario Quintana, coordinador del gabinete económico en la jefatura de gabinete.
En esa reunión le pidieron la renuncia a sus funciones, con el argumento que el próximo mes de junio de completarán los cuatro años de gestión y que el gobierno tiene pensado nuevos proyectos que suponen su alejamiento. En la reunión con Peña, a quien acompañó otro de los directores de la empresa, el abogado Fabián Rodríguez Simón, no se habló de otras razones para el alejamiento. Ante senadores del oficialismo, la semana pasada, Aranguren criticó el nivel de endeudamiento de la empresa. Esa crítica del ministro, que casi no tuvo contactos con Galuccio desde que asumió el nuevo gobierno, la ha rechazado el petrolero en apariciones en la prensa, una de ellas en www.zuletasintecho.como el sábado por la noche (Ver: GALUCCIO:”EN YPF FORMÉ GENTE QUE ME PUEDE REEMPLAZAR” http://wp.me/p74vZv-cy vía @wordpressdotcom) En esa oportunidad Galuccio estaba en su oficina, presumiblemente ordenando su salida.
De la reunión con Peña y Rodríguez Simón, quizás los hombres a quienes más escucha Macri, se habló de las condiciones de la salida: Galuccio permanecerá como CEO hasta la asamblea que está prevista para finales de abril próximo, pero que puede adelantarse. En ese lapso – como dijo en un comunicado que distribuyó su oficina a mediodía de hoy – “contribuirá a la transición”, es decir hasta que se le encuentre un reemplazante, que a esta hora el gobierno no tiene. Le dijeron que el sucesor saldrá muy probablemente de la línea de directores y gerentes que están hoy en la compañía. Entre ellos está Daniel González, CFO de la empresa por quienes algunos ponen fichas. Fue incorporado por Galuccio después de una búsqueda con “headhunters” pero tiene una estrecha vinculación con Quintana por su pasado profesional. Lo único que puede complicar su ascenso es que el gobierno critica el endeudamiento de YPF, algo con lo cual está comprometida la oficina de González como responsable de las finanzas.
En la reunión se habló también de condiciones económicas, pero hasta ahora no he podido lograr que alguien abra el pico. El salario de Galuccio es un misterio, pero es mucho más bajo de lo que se ha fabulado en la prensa. Sobre ese salario, se habló en la reunión con Peña – le correrán las normas habituales en ese nivel de conducción. Eso implica determinado número de salarios, un bono o premio y también alguna suma, más que notable, bajo una cláusula de no competencia. Con esto se suele buscar que el directivo que se va pase a trabajar a la competencia con toda la información que acumuló durante años en la cima de las decisiones.
Los expertos harán especulaciones de cuánto estamos hablando. Un miembro del directorio de YPF cobra alrededor de $ 90 mil, más perks – beneficios – y bono por desempeño. Hágase el cálculo sobre eso y quien sepa multiplicar puede llegar a un número cierto.
La presencia de Galuccio en Casa de Gobierno hizo suponer que podía haberse reunido con Macri, pero el Presidente no estaba en ese momento en la casa. Después de la reunión con Peña, Galuccio mantuvo otra con Gutiérrez, el nuevo hombre fuerte de YPF.
Aquí un diálogo con explicaciones en detalle que mantuve esta mañana con el periodista Pablo Wende por Radio Millenium: http://radiocut.fm/audiocut/ignacio-zuleta-en-pablo-y-a-la-bolsa/
La foto: Miguel Gutiérrez, ex Telefónica y nuevo presidente de YPF, en una conferencia en el CARI.
Nota bene: A los colegas, se ruega citar la fuente si usan la información publicada a esta hora. Quien no lo haga, perderá el pelo. Quien lo haga, logrará indulgencias plenarias y el depósito de 100 fopeas de oro.