Un grupo de militantes del peronismo lanzó Anoche un documento que propone una reforma constitucional, como resultado de dos días de lamer heridas en la frontera norte, invitados por Gildo Insfrán – presidente del Congreso del PJ – y José Luis Gioja (titular del Consejo Nacional, que al final se disculpó por no asistir). En un largo documento que reivindica el gobierno peronista, y abunda en críticas a todo lo que hace la gestión de Mauricio Macri, este colectivo que se arrimó junto a la frontera Norte justifica la necesidad de cambiar la carta Magna en volver a los institutos de la Constitución de 1949, es decir consolidar los lemas del peronismo que se fue. Es una audacia proponer esto cuando la sociedad que decide en las elecciones ha preferido respaldar una agenda distinta, pero se entiende a partir de la voluntad de estos peronistas de aglutinar a los propios con la ilusión de una contraofensiva.
La variedad de la concurrencia hace difícil dibujar una línea ideológica de este grupo Formosa que replica, 15 años después, lo que fue grupo Calafate que dio las bases para el proyecto Duhalde-Kirchner.
Cuesta recordar un momento de más desprestigio del peronismo después de las mascaradas con ex funcionarios y empresarios del régimen anterior traficando dólares por todos los ductos posibles. Y eso que cada vez que es formación dejó el gobierno fue escarnecida por sus adversarios, algo que puso al peronismo formal al borde de la disolución, como pasó en 1955, 1976, 1999 y ahora en 2015.
El estallido de las valijas voladoras ha precipitado lo que todos esperaban, la pulverización del kirchnerismo como consecuencia física del final de los mandatos Kirchner. Ocurrió antes de lo que pensaban los propios peronistas y también el actual oficialismo. Para el peronismo es demoledor porque descalifica a todos los dirigentes que actuaron en la primera línea del gobierno hasta diciembre pasado. Para el gobierno es un regalo del cielo porque le permite avanzar con proyectos políticos que no tienen contradicción; hasta aquellos de índole simbólica, como cubrir las vacantes de la Suprema Corte o la ley anticerrojo, que han tenido un éxito impensadoen el Congreso.
El costado negativo para el gobierno de Cambiemos es que este escurrimiento del kirchnerismo por los caños, le quita de enfrente el monstruo que le sirve para apalancar su construcción de poder. Les hubiera convenido que durase más. Para el peronismo no kirchnerista – el que nunca lo fue, y el que quiere dejar de serlo – es una oportunidad para acelerar la reconstrucción de sus filas.
Esto último es lo que explica que se hayan concentrado peronistas que quieren aprovechar este estallido del kirchnerismo para quemar etapas hacia la reconfiguración del espacio opositor, que gobierna en 15 provincias y buscará repetir el año que viene el triunfo electoral ante Cambiemos en las parlamentarias del 25 de octubre.
Entre los asistentes estuvieron el ex director de cine y ex secretario de Cultura, Jorge Coscia, los kirchneristas Gustavo Menéndez y Carlos Kunkel, el ex mercurista Fernando Chino Navarro y el parlasur Jorge Taiana, que pertenecen al movimiento Evita que migró esta semana del bloque del Frente para la Victoria, el gobernador del Chaco Domingo Peppo, Julio Fernández Baraibar, Martin Garcia, Jorge Rachid – dos ex secretarios de Medios en gestiones peronistas – el ex sciolista Francisco Cafiero, la rectora de Lanús Ana Jaramillo, Francisco Pestanha, Aritz Recalde, Jesús Maria Plaza, Floro Bogado, Jorge Cholvis, Dante Palma, Jorge Edwards, el animador y creativo de publicidad Hernán Brienza, Juan Carlos Manoukian, Jose Luis Di Lorenzo, el cafierista ex embajador en el Uruguay Hernán Patiño Mayer, el ex yerno presidencial Camilo Vaca Narvaja, Graciela de la Rosa, Juan Diaz Roig, el hoy matancero Roberto Felletti, Rodolfo Roquel, el artista Daniel Santoro, el diputado Mario Oporto, Horacio Ghilini, Juan Tangari, el senador Jose Mayans, Luis Basterra, el músico Jose Luis Castiñeira de Dios y, entre muchos otros, Mariano Pinedo.
Coscia fue uno de los principales redactores del documento, que siguió indicaciones de Insfrán, que a su vez consultó el contenido durante la semana pasada con los principales dirigentes del partido – la mayoría ausentes de la cumbre de Formosa.El celo que le puso el anfitrión a la letra de la declaración se entienden por la intención de la cúpula del PJ de que sirva como carta para convocar a la recomposición partidaria desde el sepelio del kirchnerismo.
El párrafo más audaz del texto es el que propone una reforma constitucional, y lo hace en estos términos: “Nuestra visión de los derechos es emancipatoria, a diferencia de las constituciones liberales del siglo XIX cuyo espíritu inunda nuestra actual Carta Magna. Esto tiene que ver con que, desde nuestra cosmovisión, el Estado no es el problema sino parte de la solución; sin su intervención, el único derecho es el del más fuerte. Sobre esta base, y a sabiendas de los desafíos que enfrentamos, creemos necesario afirmar que el peronismo, siguiendo su naturaleza revolucionaria, debe comprometerse con la promoción de un debate nacional sobre estas temáticas, incluyendo la posibilidad de discutir una nueva Constitución. Tal debate debe orientarse hacia un modelo de país profundamente federal e inclusivo. Este federalismo no puede ser declamativo, sino que debe garantizar que cada argentino pueda realizarse donde ha nacido o elegido vivir, para lo cual es necesario repensar la relación entre los diferentes niveles del Estado, para garantizar el crecimiento con equidad territorial y justicia social.”
El largo texto repite los lemas conocidos del peronismo, ataca el liberalismo, exalta la figura de papa Francisco, acusa al actual gobierno de buscar “un modelo de Estado mínimo, un gobierno de ricos y gerentes de grandes multinacionales”, critica al poder judicial por ser parte de “las estrategias de debilitamiento de gobiernos democráticamente elegidos” y reclama “repensar los límites y las prerrogativas de este poder del Estado”. La mano de Martín García se nota en el párrafo que enumera los nombres del olimpo partidario, lo que este publicista llama el “comando celestial“: “Arturo Jauretche, Homero Manzi, Leopoldo Marechal, Arturo Sampay, José María Rosa, Carlos Astrada, Rodolfo Puiggrós, Rodolfo Mondolfo, Enrique Santos Discépolo, Nicolás Olivari, Jorge Sabaté, César Tiempo, Cátulo Castillo, Hugo del Carril, Juan José Hernández Arregui, Mary Tapia, Rodolfo Walsh, Rodolfo Kusch, Paco Urondo, Jorge Abelardo Ramos, Héctor Germán Oesterheld, Enrique Oliva, Amelia Podetti, Leonardo Favio, Fermín Chávez, Leónidas Lamborghini, Alicia Eguren, Aníbal Troilo, Armando Poratti, Gustavo Cirigliano, Xul Solar, Carlos Gorriarena, Gerardo Vallejos, Vicente “Tata” Salemi, Chango Farías Gómez, Claudio Diaz, José María Castiñeira de Dios”.
(El documento completo del grupo Formosa puede leerse aquí: UN DOCUMENTO TRASCENDENTE DESDE EL PERONISMO / Declaración de Formosa http://www.laseñalmedios.com.ar/?p=3910)
Foto principal: los barbados “Chino” Fernando Navarro, Carlos Kunkel y Gildo Insfrán cruzan sonrisas en el lanzamiento del Grupo Formosa