No es claro si la aparición en Italia de Fulvio Pompeo, el canciller de bolsillo de Macri, con dirigentes del oficialismo, tiene que ver con el viaje de Macri. El secretario de internacionales del PRO se mostró en el palacio Giustiniani de Roma -en donde tiene sus oficinas VIP el Senado de Italia-, con Pier Ferdinando Casini, el legislador con más años en el Congreso de su país. También se entrevistó en el Palazzo Chigi con la mano derecha de Giorgia Meloni, Giovanbattista Fazzolari.

No se privó tampoco de un café con el cura argentino Guillermo Karcher, “cerimoniere pontificio” que maneja el protocolo litúrgico en el palacio vaticano. Se acodaron en una mesa del Angolo degli Artisti, café y restorán en la Piazza del Popolo. Karcher tomó conocimiento de lo que piensan en el PRO del Papa porteño. El ceremoniere se benefició del canje de figuritas. Nadie espera que un viaje de Macri a Roma suponga una visita papal, pero no hay que descartar nada.
(De la columna “Macri aprovecha la fecha FIFA, una crítica a la narrativa surrealista K y el desafío de armar el “partido del Ballotage” – Avant Premiere en Clarín de hoy https://clar.in/3X1wJp3?fromRef=twitter)
Foto: Fulvio Pompeo y Guillermo Karcher en Roma