La comisión especial del Consejo de Seguridad de la ONU que investiga el uso de armas químicas en Siria y que preside la argentina Virginia Gamba, señaló esta tarde en un informe que envió al secretario de la organización, Ban ki Moon, los casos que el grupo investigará hasta el próximo mes de setiembre, fecha en la que termina el mandato que el Consejo le dio a la OPCW – UN Joint Investigative Mechanism to the Security Council en agosto de 2014.
Ese informe es secreto y ayer mismo Ban i Moon lo reenvió a los miembros del Consejo de Seguridad ante quienes Gamba deberá dar detalles en una reunión que se hará el 22 de febrero.
La importancia del informe es que señala cinco casos a investigar para determinar si fueron usadas armas químicas en refriegas en el conflicto de Siria, y la posterior identificación de potenciales casos para encuadrar responsabilidades políticas y penales en la comisión de presuntos delitos de guerra o de lesa humanidad.
Esta presentación fue hecha hoy por la comisión Gamba con carácter de secreto, pero la noticia se filtró por la tarde en la ONU, lo que obligó a la oficina de Ban ki Moon a admitirlo en un mensaje público que tampoco dio muchos detalles de cuáles son los casos a investigar. El documento del secretario pondera la tarea realizada por la comisión Gamba y describe los próximos pasos del grupo, que incluyen un análisis de la información recopilada en la investigación desde agosto y completar la lista de casos que se investigarán. También deberá intentar la identificación de las personas, grupos y entidades de gobierno que puedan haber actuado como perpetradores, organizadores, sponsors, etc., del uso de armas químicas.
El informe de Ban destaca la colaboración del gobierno de Siria en la investigación. El régimen de Bachar Assad ha sido acusado por los llamados rebeldes que combaten contra él de haber usado bombas con gas chorine, algo que Assad ha negado.
El informe que deberán examinar antes del 22 de febrero los países que integran el consejo de Seguridad señala cinco casos de posible responsabilidad. Se trata de hechos producidos en Kafr Zita el 11 y el 18 de abril de 2014, en Talmenes el 21 de abril de 2014, en Qmenas 16 de marzo de 2015 y en Sarmin el 16 de marzo del año pasado, Un ataque reciente en Marea, ocurrido el 21 de agosto de 2014 y atribuido a militantes del Estadio Islámico, es investigado por el presunto uso de gas mostaza. El panel es integrado además por dos adjuntos, el diplomático albanés Adrian Neritani y el alemán Eberhard Schanze.
El barco USS Cape Ray retiró en 2014 581 toneladas métricas de un precursor químico para la fabricación de gas sarín de Siria. Esos químicos fueron destruidos mientras el barco navegaba por aguas internacionales.
La comisión que preside la experta Virginia Gamba fue creada en agosto del año pasado. Hasta ese momento Gamba se desempeñaba como directora adjunta del Alto Representante de la ONU para Asuntos del Desarme. En ese rol ocupó el cargo más alto que haya tenido un argentino en la ONU desde la renuncia de Susana Malcorra a la jefatura de gabinete de Ban ki Moon para asumir la cancillería del gobierno de Mauricio Macri (Argentina que fue Nobel y es poeta manejará el desarme http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=669602 vía @ambitocom).
Gamba, como Malcorra, figuran en la lista corta de candidatos a ocupar el cargo de secretario general de la ONU cuando Ban termine su segundo mandato. Según el acuerdo de los representantes ante el organismo, es el turno de una mujer y de Europa del Este quien debe ocupar ese cargo. Pero las desinteligencias entre los países de esa región pueden frustrar un acuerdo en torno a un nombre. En ese caso, el turno pasaría a una mujer de América Latina.
Quienes miran bajo el agua afirman que Malcorra, que este año debía además pedir su retiro por edad como funcionaria de la ONU, aceptó la cancillería para sumar el antecedente de haber desempeñado esa función. Malcorra cuenta con el compromiso del gobierno argentino, comunicado a los otros países de la región por el gobierno de Cristina de Kirchner, para el voto en su favor en caso de abrirse esa posibilidad. Malcorra fue una gran colaboradora de las gestiones del gobierno Kirchner ante la ONU en su conflicto con los acreedores de la deuda irredenta que litigan en el juzgado de Thomas Griesa. (Malcorra, empresaria y radical, será canciller http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=817414 vía @ambitocom)
Gamba es una experta en estrategia y desarme de prestigio internacional. Es autora de los libros más importantes sobre el conflicto de Malvinas y ha vivido en Suiza, Estados Unidos y Sudáfrica, en donde coordinó el exitoso programa de desarme de sociedad civil para el presidente Nelson Mandela. Ha sido profesora en universidades de todo el mundo, fue asesora del ministerio de Defensa bajo el gobierno de Raúl Alfonsín. En 1995 compartió el Premio Nobel de la Paz como miembro de la organización pro desarme nuclear Pugwash. Por si le faltase algún crédito, en 2012 ganó un premio internacional de Poesía Mística por su libro “Proof”. Detalles de su vida los ha contado en el libro “Chocolate chino en Budapest: Experiencias y esperanzas de una mujer sin fronteras (Buenos Aires: Sudamericana, 2011).
Antes de reincorporarse a la ONU en el cargo que tiene ahora, Gamba fue durante varios años la jefa de estudios de la Escuela de la Policía Metropolitana bajo el gobierno de Macri. Como experta en el tema Malvinas, viene de terminar un libro sobre ese conflicto en coautoría con otros expertos como Juan Archibaldo Lanús y los nuevos embajadores en la ONU y el Vaticano, Martín García Moritán y Rogelio Pfirter. Esa obra será presentada en abril próximo y es posible que Gamba visite el país con ese motivo.