Le agrega morbo a la historia el hecho de que la demora de María Eugenia Bielsa en tramitar los fondos para financiar el proyecto es lo que le costó el cargo. Fue después de que el ministerio de Vivienda perdiera la oficina en manos de Arroyo. Este ministro firmó el jueves con el BICE el acuerdo para crear el fideicomiso para manejar los dineros ya recaudados por el impuesto País – el recargo al dólar turista – con esa finalidad. Son ya $11.000 millones lo que tiene el Fondo de Integración Socio Urbana (así se llama esa nueva caja). Para quienes siguen la saga de Massa como el pacman que se queda con todas las cajas, tiene aquí otro testimonio porque ese banco estatal lo maneja, como al ministerio de Desarrollo, el massismo a través de José Ignacio de Mendiguren. Unos dineros que hubiera querido tener el nuevo ministro de Vivienda, Jorge Ferraresi. Lo madrugaron antes de asumir. El dedo eléctrico en el gabinete lo tiene Grabois, aunque lo apliquen Cristina y Alberto, aunque sea en beneficio de Massa. Este programa se lleva una porción también de lo que se recaude por el impuesto a los ricos que este martes va al recinto de los Diputados. Un seguro para que las organizaciones entornen de afecto la sesión, como lo hicieron cuando se aprobó en 2016 la ley de economía popular y en 2018 la ley de villas. Ese abrazo puede ser este martes más eficaz que cien rosqueos de Máximo, a quien le cuesta aprender cómo se maneja un bloque de 119 diputados siendo oficialismo. Aparece votando en las dos últimas sesiones, pero desde algún lugar del éter. Para el terreno tiene como mariscales a los Moreau, Leopoldo y Cecilia. En la sesión del nuevo impuesto seguramente aparecerá. No porque la sanción remedie mucho por el monto que recaudará – bien poco para los agujeros que provoca un Estado derrochón y amiguero. Sí porque es una señal para identificar a los enemigos de clase sobre la cual montar la campaña electoral que se viene. Delicada operación de maquillaje por el lugar que ocupa su familia en esa división entre ricos y pobres.
(De la columna “Turbulencias que llegan desde el Norte” en Entretelas de la política en Clarin de hoy – https://clar.in/3nr1ouJ?fromRef=twitter)