A pocas horas del viaje de mañana a Chile, adonde participará de una reunión regional de países de la alianza Asia-Pacífico, Mauricio Macri se zambulló en el estudio del escenario internacional. El resultado de las elecciones españoles, la de Gran Bretaña y Venezuela, ocuparon la casi totalidad de la reunión de gabinete. También recibió informes de embajadores sobre esas cuestiones.
Susana Malcorra dominó el micrófono en la cita de la mañana con los ministros para explicar las consecuencias del referéndum británico que entiende son beneficiosas para la Argentina, aunque eso se verificará en el mediano plazo, en razón del proceso lento de divorcio entre Gran Bretaña y el sistema europeo.
Ese cisma, según el análisis de la cancillería argentina, abre una era de relaciones más fructíferas con Europa en razón de que quedarán sin efecto los vetos que Londres imponía a sus socios continentales por el entredicho por la soberanía en las islas Malvinas.
La Argentina podrá disponer de un amplio margen de acción para proyectos de inversión pesquera y de hidrocarburos en el mar continental con empresas sin pasar por las restricciones inglesas.
En el terreno financiero, Alfonso de Prat-Gay agregó que no habrá efectos negativos de esa votación en materia de tasas de interés, porque ” la Argentina ya toda la deuda que tenía que tomar la tomó; de hecho, ya rechazó la posibilidad de nuevos endeudamientos, así que no nos afecta en nada con respecto a los temas financieros generales”. La explicación se refiere al dinero que tomó el gobierno para pagar a os bonistas, que cubre las necesidades hasta el año que viene.
Susana Malcorra no soltó el micrófono en el gabinete de ayer para explicar Brexit, Veneuela y España. Alfonso de Prat Gay dijo que voto inglés no golpea al país en materia financiera
En el tema Venezuela, Malcorra repasó el debate sobre la discusión en la OEA de la llamada cláusula democrática. La canciller mantuvo en los últimos días una reunión con el negociador de los EE.UU. ante Caracas, el diplomático Tom Shannon, y la conclusión de ese encuentro es que las posiciones del gobierno de Nicolás Maduro y la oposición son hoy irreconciliables y que están más allá de la racionalidad, con lo cual la posibilidad de un acuerdo es muy difícil.
La presión de EE.UU. y de la Argentina, a partir de esos encuentros, es presionar a Maduro para que acepte el proceso revocatorio. Según ese análisis, la dificultad es la puja interna entre sectores del ejército de ese país en forma de apoyar a Maduro.
Los países de la región esperan que rinda su fruto el acuerdo entre Colombia y las FARC, incluye cláusulas no conocidas que obligan a esos dos países y a los que vigilan el acuerdo, como Cuba y Venezuela. La Habana espera un levantamiento total de las restricciones comerciales con EE.UU., que lo condicionó a que presionase a las FARC para un levantamiento total del fuego y a Caracas a que llegase a algún acuerdo con la oposición. Uno de los garantes de ese complejo paquete es el papa Francisco, que aporta su padrinazgo sobre los Castro y Maduro.
Sobre España el gobierno recibió en la tarde del lunes un informe del embajador Ramón Puerta sobre las posibilidades de que el Partido Popular pueda formar gobierno después de la elección del domingo, en la que mejoró el respaldo popular. Puerta estuvo en el país durante toda la semana que pasó, para declarar ante la justicia de San Nicolás sobre lo que no sabe acerca de muerte de Carlos Menem (h).
Estuvo en el despacho presidencial antes de viajar el lunes a Madrid junto en el momento cuando Macri habló por teléfono con Lionel Messi, en un diálogo de consuelo presidencial que cerró un compromiso para que el vapuleado jugador visite al presidente antes de regresar a España.
Puerta completó el informe anoche desde Madrid, después de cenar con el ex premier Felipe González, que sigue conservando gravitación sobre el PSOE. En una cena que compartió en la residencia con Puerta, Eduardo y Chiche Duhalde, y el empresario Leandro Sigman Gold (titular de la Cámara Empresarial Argentina en España), Felipe reiteró sus críticas a David Cameron. El gobernante inglés, dice, quiso quemar los muebles para salvar la casa y terminó perdiendo la casa. Ese proceso, según explicó González, es consecuencia de un proceso de decadencia de las fuerzas de centro y el crecimiento de los extremismos, algo que observa también en la campaña electoral de los EE.UU.
González no adelantó nada acerca de la posición de su partido en el debate de investidura que comienza el 9 de julio en las Cortes de España (día en que llega a ese país Barak Obama), pero admitió que con el resultado del domingo Mariano Rajoy es quien está en mejores condiciones de formar gobierno.
Escuchó paciente las especulaciones de la mesa sobre 1) un potencial acuerdo PP-PSOE que se basa sobre una eventual abstención de los socialistas; 2) la posibilidad de que Ciudadanos apoye al PP, pero reclamando que Rajoy no sea primer ministro. En ese caso, el cargo puede ir al actual canciller José Manuel García-Margallo o la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría.
Mariano Rajoy (en la foto festejando en la noche del lunes la votacion del PP) es quien está en mejores condiciones de formar gobierno, dijo anoche Felipe González en cena con Ramón Puerta y Eduardo Duhalde en la embajad argentina en España
González vendrá a la Argentina a fines de julio como lo hace todos los años para acompañar las actividades del músico Daniel Barenboim. El ex premier es el animador principal de la Fundación Barenboim-Said, creada por el pianista y el crítico literario Edward Said en 1999 con sede en Sevilla y que auspicia las actividades de la West-Eastern Divan Orchestra. De esa fundación forman parte también el empresario Hugo Sigman, un argentino que vive hace años en Barcelona, padre de Leandro, el ex embajador en Madrid Carlos Bettini. Esa orquesta tiene programados varios conciertos en la última semana de julio en el teatro Colón.
Duhalde estuvo en esa cena en la etapa final de un viaje de vacaciones a Marbella, adonde estuvo más de una semana. En esa ciudad, que suele frecuentar, recibió honores oficiales como ex mandatario de parte del alcalde local, José Bernal, quien le hizo firmar el libro de Honor de la Ciudad, en razón de que, dijo Bernal, “tuvo un cargo institucional tan importante y que ostenta un gran prestigio internacional”.
El embajador Puerta despedirá hoy a Duhalde y en el mismo día recibirá a otro peregrino criollo, el ex gobernador José Manuel de la Sota, hoy aliado de Sergio Massa, que se mantiene cerca del macrismo, por ahora.
Foto principal: Eduardo Duhalde, Felipe González y Ramón Puerta anoche en la embajada argentina en Madrid, tras una cena seminario de tres presidentes en la nueva Puerta de Hierro