Este jueves a las 19 se reunirán en el despacho de Sergio Massa los caciques de la oposición con el ministro del Interior Eduardo de Pedro. La cita es para un café que reemplaza al almuerzo que Wado había ofrecido este martes. La mesa de Juntos por el Cambio decidió reunirse antes para resolver que no darán un paso sobre el proyecto de postergación de las PASO, sin antes escuchar qué quiere en realidad el gobierno. En la mesa estarán Mario Negri, Juan Manuel López y Cristian Ritondo, jefes del interbloque de JxC, pero el formato está abierto y puede ser que asistan también autoridades partidarias. Es presumible que, además del anfitrión Massa, este Máximo Kirchner. También es previsible que llegue cuando la reunión haya comenzado. Es un rasgo de estilo con el cual logra levantar su estatura política frente a esas estrellas de la política criolla.
La posición de JxC es que las PASO deben hacerse. Admiten conversar sobre postergación hasta setiembre, pero no sobre suspensión ni ley de lemas. También aceptan una postergación por un mes de las elecciones, previstas para octubre. Además, piden que se use la boleta única y que se reponga la posibilidad del voto por correo para los argentinos residentes en el extranjero.
En las últimas horas este sector de la oposición se entregó a un debate entre todos los niveles. Mauricio Macri habló el martes con Elisa Carrió. En noche de ese día, Alfredo Cornejo, presidente de la UCR se reunió con Enrique Nosiglia, el máximo referte de su partido en el distrito CABA. Este miércoles Negri parlamentó en su casa de Capilla del Señor con Elisa Carrió. Negri, por la tarde, había ajustado la posición del interbloque que preside con López y Ritondo.
El gobierno tiene tres posiciones divergentes, que usa para facilitar la negociación. 1) Cristina de Kirchner quienes que se hagan. Su vocero, Máximo, ha dicho que él no puede estar en contra porque las PASO las creó su papá. Se sabe, además, que conviene a los proyectos del cristinismo de disputar posiciones en los municipios de Buenos Aires que controlan los dinosaurios del peronismo provincial. 2) Alberto Fernández está a favor de la postergación, por lo menos, y es lo que reclama su ministro del Interior. En la misma actitud están los gobernadores de todos los partidos. No tiene respuesta a la duda sobre si la postergación a setiembre de las primarias supone también la anulación a elecciones adelantadas en provincias como Misiones, Salta y Jujuy. 3) Sergio Massa está en contra de las PASO. Le conviene más negociar desde su posición en la trifecta presidencial que organizar a sus seguidores para unas primarias contra el cristinismo y los dinosaurios.